Si crees en el poder mágico de las piedras, Las perlas de agua dulce ayudan a las personas a abrirse y a encontrar su verdadero propósito, ayudan en el autoestima y a el amor por los demás.
El ágata tiene el poder de armonizar el yin y el yang en tu sistema. Es una piedra calmante y aliviadora, que trabaja despacio pero aporta una gran fuerza.